viernes, 15 de agosto de 2014

Funchal: Una bella isla en el Atlántico Norte


La catedral de Funchal, en la isla de Madeira, es uno de los edificios que sobrevivieron intactos desde los tiempos de la colonización portuguesa. El exterior es muy sobrio, sin embargo el interior está lleno de pinturas, estatuas y capillas. En la catedral destacan los asientos  que exhiben santos, profetas y apóstoles . En los detalles decorativos de los asientos y apoyos para los brazos pueden verse aspectos de la vida de Madeira. En el suelo encontraremos tumbas de obispos y comerciantes. Diseñada por Pero Anes, empieza a construirse en 1493. Fue consagrada en 1514, cuando a Funchal se le concedió el estatus de ciudad, y se finalizó en 1517.


Largo do Chafariz.


Los Jardines tropicales de Monte Palace están situados en la preciosa cumbre de la colina de Monte y rodeados de impresionantes vistas a la bahía de Funchal. Monte Palace, un lugar lleno de historia y que data del siglo XVIII era un hotel de lujo, ahora transformado en un encantador jardín y un museo perteneciente a la Fundación Bernardo.


Las puertas decoradas con graffitis son típicas del arte popular de Funchal.


La fecha exacta del inicio de la construcción de la Fortaleza de São João do Pico se desconoce hasta hoy, pero se cree que el trabajo ya había comenzado en 1606. El fuerte no se completó hasta la segunda mitad del siglo XVII. En el siglo XX, la fortaleza pasó a manos de la Armada, que estableció su centro de comunicaciones en ella. Desde 1943, todo el complejo es un monumento protegido. La empinada subida a la fortaleza vale la pena, porque ofrece una fantástica vista panorámica de Funchal y el océano.


Funchal y gran parte de Madeira ha sido declarada por la las naciones Unidas (UNESCO) como Reserva de la Biosfera, debido también al polifacético artista César Manrique, gran impulsor de la declaración. 

  

La casa de Cristiano Ronaldo en Funchal también se ha convertido en un potente incentivo de la isla. Esta lujosa mansión, de líneas lisas y grandes ventanales a lo Van der Rohe, resulta grandiosa y ''moderna''. Quien reside en ella no resulta menos grandioso y ''moderno''...

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