La Serranía de Ronda en sí se trata, no sólo del enclave de la ciudad, sino de todo el hermoso panorama colindante.
El girasol es muy señalado en estas tierras y proporciona un toque de delicadeza a los campos agrarios que dejan crecer dispares cultivos por toda la zona.
A unos 20 km de la propia ciudad se encuentran las magníficas ruinas de Acinipo, ancestral núcleo perteneciente a la civilización romana y que es el origen de la Ronda actual, desplazada a tierras ''algo'' más llanas. Aunque tampoco se pueden olvidar los hallazgos de la Cueva de la Pileta y otros relativos a la Prehistoria.
Antonio Ordóñez
Cayetano Ordóñez
Muy famosa por sus corridas goyescas (corridas de toros en las que se utilizan trajes de la época del pintor Francisco de Goya, y que se celebran en septiembre), es propiedad de la familia Ordoñez, así que las esculturas de Antonio y Cayetano Ordóñez lo dejan bien patente, situadas en la plaza frontal del monumento.
Lo más actual y curioso de Ronda (y tal vez menos conocido) es la afluencia de turistas asiáticos que posee. Esto es así no sólo por el encanto natural de los paisajes, o por ''esa esencia'' que muchos extranjeros entienden como ''propiamente española'', sino porque la urbe fue lugar de inspiración para varios japoneses. El paseo de Kazunori Yamauchi, famoso diseñador de videojuegos nacido en el país del Sol Naciente, se inspiró en los paisajes de la sierra para crear los escenarios de sus creaciones. Otro japonés, el pintor Miki Haruta, quien pasó su última parte de la vida en Ronda, yace allí, en medio de un pintoresco parque circundante al mirador de la sierra, en una tumba que imita un templete extremoriental. Para finalizar, el paseo de Hemingway, pese a no tener que ver con Asia en sí, también es un camino muy reconocido en el lugar. Está dedicado a este novelista estadounidense, el cual fue un ferviente aficionado a las corridas de toros de Ronda.