Fernando Alonso y McLaren

Fernando Alonso y McLaren levantaron la lona de su nuevo coche, el MP4-30, el segundo del español en su paso por la escudería inglesa. En 2007 dejó un monoplaza campeón tras un año de huracanes y ahora retoma el camino con una máquina prometedora, espectacular en sus líneas y con potencial a afilar. En una presentación on line McLaren ha difundido las primeras imágenes del prototipo que ya el próximo domingo estrenará el asturiano en el circuito de Jerez en el primero de los test que llevará a cabo en febrero para conseguir la mejor puesta a punto de su montura.

Atrás quedaron los excesos de la F1 (y de Valencia), recogidos en aquel show urbano por la Ciudad de las Artes que organizó McLaren para presentar su coche y, sobre todo, dar la bienvenida al que por entonces era el bicampeón del mundo más joven de la historia. Cuatro millones de euros costó la fiesta, con regalo de móviles de 200 euros para 1000 personas, sorteos de Mercedes y actuaciones del Circo del Sol aliñadas con copas de Johnnie Walker etiqueta negra. Ahora la mesura marca los 'openings' de las escuderías de F1.

El objetivo es llegar al sábado 14 de marzo en las mejores condiciones posibles. Ese día arranca la primera sesión de clasificación del año, la mejor ventana para realizar pronósticos de cara a las carreras que horas después comienzan en ese circuito de Melbourne. Tiene mucho trabajo por delante Alonso con un monoplaza cargado de historia, buenas intenciones y un nuevo motor Honda que llega para competir con el corazón de los Mercedes, el secreto del éxito en 2014 de la marca alemana. Ellos son otra vez los favoritos. A McLaren le tocará recortar camino, perfeccionar el renovado matrimonio con Honda y dejar que las manos del piloto español aporten su experiencia y habilidad. Él dice que será difícil que peleen por victorias, pero en el paddock nadie le descarta, a falta de comprobar cómo resopla en los entrenamientos.